10 formas de desahogarte sin hablar con nadie

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Ericka tenía 28 años y trabajaba como analista en una empresa que, aunque no era su lugar soñado, le permitía pagar las cuentas y darse pequeños lujos. A simple vista, todo parecía estar bien: tenía un grupo de amigas con las que salía los viernes, un departamento decorado con su estilo y un gato llamado Pecas. Sin embargo, últimamente, sentía que todo la sobrepasaba, simplemente era demasiado.

Las exigencias laborales se acumulaban, los mensajes de “¿cuándo terminas el reporte?” no dejaban de llegar, y las pequeñas discusiones con su pareja se volvían más frecuentes. Una tarde, al llegar a casa después de un día especialmente difícil, Ericka se desplomó en el sofá y pensó: ¿Qué hago con todo esto que siento?

Fue entonces cuando entendió que necesitaba un espacio para desahogarse, pero no tenía claro por dónde empezar.

Si tú también te has sentido como Sofía, este artículo es para ti.

Aquí te comparto formas prácticas, amigables y sin juicios para liberar el estrés acumulado, conectar contigo misma y volver a sentirte un poco más en paz contigo y con el mundo.

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1. Grita como si nadie te escuchara

De verdad, lo digo en serio. Grita a una foto de las personas con las que están enfadados. Grita a la ropa que no te queda bien o a la habitación desordenada o a todas las facturas. Definitivamente grita en la ducha. Simplemente déjalo salir.

Imagina esto: estás sola en casa, y las emociones te están quemando por dentro. Gritar puede parecer extraño o hasta un poco loco, pero tiene un poder terapéutico. Cierra las puertas, agarra una almohada o simplemente dirígete a la ducha y suelta un grito. Grita al vacío, a los problemas, a las cosas que te frustran, y deja que tu cuerpo libere toda esa energía atrapada.

¿A quién le importa? Pasamos mucho tiempo pensando en lo que los demás piensan de nosotros; es saludable tomarse unos minutos y dejar ondear nuestra bandera de justa indignación lo más alto posible.

¿Por qué funciona? Según estudios de psicología emocional, liberar emociones reprimidas (como el enojo o la frustración) a través del grito puede reducir los niveles de estrés acumulado. Es como darle un botón de “reset” a tu cerebro.

“Gritar no es perder el control; es liberar todo aquello que te pesa.”

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2. Lanza un montón de almohadas.

avienta almohadas para liberar tu enojo¿Sientes que la rabia te consume? Transforma esa energía en movimiento. Busca un espacio seguro en tu casa, apila un montón de almohadas y lánzalas contra la pared o al suelo. Nadie se lastima, nada se rompe, pero tú te sientes mucho mejor.

No apuntes a nada rompible porque eso sólo alimentará el fuego. Pero, de verdad, hay algo muy catártico en lanzar, con toda la fuerza, un montón de almohadas a una pared o al suelo o a lo que te apetezca.

Este tipo de actividad también es excelente para liberar tensiones físicas. Además, el simple acto de movimiento ayuda a calmar tu sistema nervioso, según especialistas en manejo del estrés.

Si no tienes almohadas a la mano, también puedes recurrir a una rutina de ejercicio intenso como saltar o hacer una pequeña caminata rápida.

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3. Cómete un helado

¿Tu helado favorito te está esperando en el congelador? Es momento de disfrutarlo, sin remordimientos. A veces, un momento de indulgencia es justo lo que necesitas para sentirte más ligera. Comer algo que realmente disfrutes, con calma y presencia, no es solo un capricho, sino una forma de conectar contigo misma.

Come lo que quieras. Disfruta al máximo. En ese momento, es bueno para ti porque te hará sentir bien. Y a veces sólo necesitas sentirte bien.

A veces, un postre es más que comida: es un abrazo que le das a tu alma.

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4. Pon tu música a todo volumen.

La música tiene un efecto casi mágico en nuestras emociones. ¿Tienes una canción que te hace bailar como si nadie te viera? Pónla. ¿Una balada que siempre te saca lágrimas? Adelante. Cantar, bailar o simplemente dejar que la música te envuelva puede ayudarte a liberar tensiones acumuladas.

Y canta, baila y llora.

Haz un karaoke improvisado con tus canciones favoritas. No importa si cantas desafinado; la idea es liberar lo que llevas dentro.

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5. Hazte bolita en el sofá

Ericka recordaba algo que su mamá solía decirle: “A veces, llorar es como limpiar el alma.” En una tarde particularmente difícil, se hizo bolita en el sofá con su manta favorita y dejó que las lágrimas fluyeran. No necesitaba explicaciones ni justificaciones. Solo era un momento para estar con ella misma.

Si necesitas llorar, no lo evites. Llorar es una forma natural de liberar emociones y reducir el estrés. Según la psicóloga Judith Orloff, llorar libera oxitocina y endorfinas, lo que puede ayudarte a sentirte más tranquila después.

Coge tu manta favorita y llora a mares si lo necesitas o duerme. Apaga tu teléfono y simplemente siéntelo todo.

A veces un buen llanto es lo más productivo que podemos hacer.

Un buen llanto no te debilita; te limpia y te fortalece.

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6. Canaliza tu energía en algo productivo

¿Has notado Canaliza tu frustracioncómo algunas personas limpian toda la casa cuando están estresadas? Usar esa energía acumulada para algo productivo puede ser muy terapéutico. Organiza tu clóset, lava los platos o limpia esa esquina que has estado posponiendo por días.

Además de despejar tu mente, el orden externo también genera una sensación de calma interna.

Usa este momento como una metáfora para “poner en orden” no solo tu casa, sino también tu mente.

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7. Mantén una conversación contigo misma.

No te preocupes si suena raro. Tener una conversación contigo misma puede ser más útil de lo que imaginas. Imagina que estás frente a tu jefe, tu pareja o cualquier situación que te haya frustrado, y di exactamente lo que piensas.

¿El truco? Ser brutalmente honesta contigo misma, sin filtros ni censura. Este ejercicio te permite reconocer tus emociones y encontrar claridad.

Hablar contigo misma no es extraño; es darte el espacio para escucharte de verdad.

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8. Mira por la ventana (y déjate llevar)

A veces, lo más simple es lo más efectivo. Tómate unos minutos para mirar por la ventana o quedarte sentada en silencio. Observa el movimiento de las hojas, los colores del cielo o simplemente enfócate en tu respiración. Este tipo de pausa consciente te ayudará a reconectar contigo misma y a calmarte.

A veces, llevar tu atención a un punto externo es todo lo que necesitas para dejar que tu mente respire y tu corazón se calme.

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9. Escribe una carta que nunca enviarás

Tómate unos minutos para escribir todo lo que sientes, sin filtros ni miedo al juicio. Puedes dirigirla a la persona o situación que te hace sentir así, o incluso a ti misma. Derrama todas esas emociones en el papel: el enojo, la tristeza, la frustración. Luego, si quieres, rómpela, guárdala o simplemente déjala ahí.

Escribir te permitirá organizar tus pensamientos y liberar la carga emocional que llevas dentro, incluso si nunca nadie llega a leer esas palabras.

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10. Haz una combinación de los números 1 a 9.

Ericka, después de semanas de sentirse perdida, decidió probar algo diferente. Una tarde, después de un día particularmente pesado, se permitió gritar en la ducha, tiró un par de almohadas al suelo y luego limpió su cocina escuchando su playlist favorita. Más tarde, se hizo bolita en el sofá con su helado preferido, lloró un poco y, al final, se quedó viendo por la ventana hasta que se sintió más tranquila.

No era magia, pero sí se sentía como un nuevo comienzo.

Por extraño que parezca, esa vieja gratitud consciente probablemente resurgirá porque

Estás navegando por las turbulentas aguas de la vida como un auténtico humano que siente, viviendo el momento y aceptando el hecho de que no te sientes feliz.

Y eso, en mi opinión, es muy consciente.

No hay una fórmula perfecta para soltar tus emociones; mezcla lo que necesites y crea tu propio ritual de liberación.

Leer información y consejos escritos por un psicólogo profesional puede ser de gran ayuda para muchos, pero si llegarás a considerar que requieres hablar con un profesional, lo más recomendable es solicitar consejería para tu situación particular con un psicólogos en la CDMX.

Referencias de 10 formas de desahogarte sin hablar con nadie

Access to this page has been denied. (s. f.). https://www.apartmenttherapy.com/10-ways-to-calm-down-when-youre-angry-237185

 

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6 comentarios en “10 formas de desahogarte sin hablar con nadie”

  1. mu… muchas gracias emily ojeda por tus consejos.
    ya no sabia que hacer, te agradesco demasiado,
    espero que tengas un bonito y execelente dia
    que dios te bendiga y te llene de sus bendiciones

    1. Siento mucho que la tristeza siga ahí, y entiendo cómo puede parecer que nada ayuda en esos momentos. Lo que ganas con estas acciones no siempre es eliminar la tristeza de inmediato, porque no es algo que desaparezca de un momento a otro. Pero sí te ayudan a aliviar un poco la carga, darte un respiro y encontrar pequeños momentos de calma o claridad en medio de lo que sientes.

      A veces, estas pequeñas cosas son un primer paso para procesar lo que llevamos dentro. Si la tristeza sigue siendo muy pesada, te animo a que hables con un terapeuta o alguien de confianza. Mereces sentirte escuchado y acompañado mientras atraviesas esto. Aquí estoy si necesitas desahogarte o compartir cómo te sientes. 💛

    1. Hola Gloria, siento mucho que te sientas así, y quiero que sepas que no estás sola. Es completamente válido sentirse frustrada o decepcionada de uno mismo a veces; somos humanos y esas emociones son parte de nuestro proceso de aprendizaje y crecimiento.

      Te animo a que te tomes un momento para ser amable contigo misma. A veces somos nuestros críticos más duros, pero recuerda que lo estás intentando, y eso ya es valioso. Si te sirve, prueba alguna de las ideas del artículo, como escribir lo que sientes o simplemente darte un momento para descansar y procesarlo todo.

      Si estas emociones persisten, considera buscar apoyo con un profesional que te ayude a trabajar en lo que estás sintiendo. Pedir ayuda es un acto de fortaleza, no de debilidad. Aquí estoy si necesitas más apoyo. 💛

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