Mucha gente sabe lo que significa la palabra “límites”, pero no tiene ni idea de lo que son. Te ayudamos a comprenderlos y a empezar a practicarlos.
¿Qué son los límites?
Se refieren a los límites que establecemos en nuestras relaciones personales, laborales y en nuestra vida en general, para proteger nuestra integridad, bienestar y satisfacción.
Los límites son una forma de comunicar a los demás cuáles son nuestras necesidades, deseos y expectativas, y cómo deseamos que nos traten.
Los límites pueden ser físicos, emocionales y mentales. Por ejemplo:
- Los límites físicos pueden incluir establecer zonas de privacidad o proteger el espacio personal.
- Los límites emocionales pueden implicar establecer límites en las relaciones interpersonales para proteger nuestros sentimientos y emociones.
- Los límites mentales pueden incluir establecer límites en la cantidad de información que permitimos que entre en nuestra mente, como límites para la exposición a noticias o redes sociales.
Establecer límites es una parte importante del cuidado personal y pueden ser fundamentales para nuestra salud mental y emocional.
¿Cómo empezar a poner límites?
- En relaciones personales: Empieza por identificar tus propias necesidades, deseos y límites. Luego, comunica tus límites de manera clara y sin culpar a la otra persona. Puedes usar declaraciones “yo” para expresar tus sentimientos y necesidades, por ejemplo: “Me siento incómodo cuando…”, “Me gustaría que…”, “Mi límite es…” También es importante ser coherente y mantener tus límites de manera constante.
- En el trabajo: Identifica tus responsabilidades y horarios, y comunica tus límites de manera clara y respetuosa. Es posible que debas decir “no” a tareas o proyectos que están fuera de tu capacidad o horario, y debes aprender a priorizar tus tareas y delegar tareas cuando sea necesario. También es importante establecer límites en la comunicación fuera del horario de trabajo para evitar el agotamiento.
- En las amistades: Identifica tus necesidades y expectativas en las amistades, y comunica tus límites de manera clara y respetuosa. Por ejemplo, si no quieres estar disponible para hablar todos los días, o si necesitas espacio para ti mismo, comunica eso. También es importante establecer límites en cuanto a la frecuencia de las salidas y las actividades.
- En la familia: Identifica tus necesidades y expectativas en cuanto a la comunicación y las interacciones familiares, y comunica tus límites de manera clara y respetuosa. Es importante reconocer que puede haber presiones culturales y familiares que hacen que establecer límites sea más difícil, pero es importante recordar que tienes derecho a establecer límites para proteger tu bienestar emocional.
¿Por qué es difícil establecer límites?
A veces es difícil establecer límites por varias razones:
- Miedo al rechazo: A menudo nos preocupa que establecer límites pueda provocar la pérdida de una relación importante o generar conflicto con otras personas. El miedo a ser rechazados o juzgados puede hacer que evitemos establecer límites, incluso cuando es importante para nuestro bienestar emocional.
- Falta de habilidades de comunicación: A veces no sabemos cómo expresar nuestros límites de manera efectiva, o nos resulta difícil ser asertivos y directos. Esto puede hacer que nos sintamos incómodos o ansiosos al establecer límites, y puede hacer que otros no nos tomen en serio.
- Condicionamiento social: A menudo se nos enseña a ser complacientes y a evitar el conflicto, lo que puede dificultar el establecimiento de límites. Además, a veces nos sentimos obligados a cumplir con las expectativas sociales o culturales en lugar de seguir nuestras propias necesidades y deseos.
- Culpa o autoexigencia: A veces nos sentimos culpables por establecer límites, como si estuviéramos siendo egoístas o no considerando los sentimientos de los demás. También podemos sentirnos presionados por nuestras propias expectativas de perfección, como si tuviéramos que estar siempre disponibles y comprometidos con los demás.
- Baja autoestima: A veces no nos valoramos lo suficiente como para establecer límites saludables. Podemos pensar que no merecemos tener nuestras necesidades satisfechas o que nuestros límites no son importantes.
Leer información y consejos escritos por un psicólogo profesional puede ser de gran ayuda para muchos, pero si llegarás a considerar que requieres hablar con un profesional, lo más recomendable es solicitar consejería para tu situación particular con un psicólogo en línea.
Referencias: Pattemore, C. (2021, 3 junio). 10 Ways to Build and Preserve Better Boundaries. Psych Central. https://psychcentral.com/lib/10-way-to-build-and-preserve-better-boundaries