Tips para motivar a un adolescente

Cómo motivar a un adolescente es una pregunta común de los padres. A veces, los adolescentes necesitan motivación para concentrarse en sus estudios o incluso para desarrollar actividades para desenvolverse ya que la mayoría de ellos tiende a pasar más tiempo en las redes sociales, viendo programas de televisión o cualquier otra cosa.

Nuestros hijos no se volverán instantáneamente motivados y responsables. Pero con el entorno adecuado y la inspiración de nuestra parte, sucederá a su debido tiempo.

Leer información y consejos escritos por un psicólogo profesional puede ser de gran ayuda para muchos, pero si llegarás a considerar que requieres hablar con un profesional, lo más recomendable es solicitar consejería para tu situación particular con un psicólogo en línea.

¿Por que es importante motivar a un adolescentes?

Establecer una buena comunicación y vinculación con su adolescente puede ayudarlo a explicarle la importancia de un buen desenvolvimiento. Sin embargo, también es necesario abordarlo positivamente. Los castigos o los acercamientos contundentes pueden desmotivarlos y hacerlos sentir incomprendidos o indignos.

Si eres una madre o un padre que busca inspirar a tu hijo y lograr que alcance su máximo potencial pero no logras motivar a un adolescente, te traemos algunos consejos interesantes.

Empatiza para motivar a un adolescente

Para saber cómo motivar a los adolescentes a estudiar, es necesario comprender cómo se sienten y piensan. Tienes que ponerte en su lugar. Los adolescentes son extremadamente emocionales y sensibles. Hable y trate de entender su punto de vista y luego explique el suyo.

Es importante entender por qué su joven adolescente no quiere hacer su trabajo.
La mejor manera de lidiar es confrontar y descubrir qué le impide estudiar.
Tu adolescente podría inclinarse por un tema y temer o no gustar del otro.
Es posible que a su hijo le resulte difícil hacer frente o comprender lo que se enseña en clase.
Hablar con su adolescente lo ayudará a empatizar e identificar la fuente de los problemas.

Gritar nunca ayuda, conversar sí

Regañar a su hijo adolescente por el más pequeño de los errores no servirá de mucho. Si sigues gritándole por todo, tu adolescente se distanciará emocionalmente y puede que deje de escucharte como señal de protesta.

Sea amable y tranquilo , pero firme en su tono.
Hazle entender por qué crees que es necesario estudiar.
Discuta con calma cómo la va a beneficiar.

Es mucho más efectivo que los gritos al azar y las largas conferencias.

No aumente las expectativas

No eleves tus expectativas muy alto la primera vez. A menudo, las expectativas muy altas pueden limitar a su adolescente y ponerla ansiosa y presionada.

Enfatiza más en un patrón regular y trabajo duro.
Enséñele a su hijo adolescente a apuntar a metas pequeñas y sucesivas, una a la vez.
Enséñele a establecer otra meta una vez que haya logrado una anterior.
Trabajar a través de metas sucesivas ayudará a su adolescente a aprender y lograr más a largo plazo.

Actividades extracurriculares

Asegúrese de que su énfasis en el estudio no frene los intereses creativos y otras actividades productivas.

Anime a su adolescente a salir y jugar.
Ayúdala a dedicar tiempo a sus diversos intereses y pasatiempos.
Hacer esto no solo refrescará la mente de su adolescente, sino que también será una buena inversión de tiempo para mejorar sus habilidades.

Déjalos cometer errores

Nuestros hijos aprenden mucho cuando cometen errores y, si somos honestos, nosotros también. No se apresure a intervenir y arreglar las cosas cuando su hijo se equivoque.

Permítale aprender de las consecuencias naturales de sus acciones. Será una lección mucho más vívida si nuestro hijo adolescente decide ignorar sus deberes y luego tiene el terrible trabajo de hacer todo lo acumulado.

Si el trabajo es lo suficientemente agotador o desagradable, será mucho más probable que recuerde hacerlo solo en el futuro.

Sin embargo, debemos estar dispuestos a darles a nuestros adolescentes muchos recordatorios, en lugar de esperar que hagan todo sin que se les indique.

Recuerde, estamos trabajando para ayudarlos a aprender responsabilidad y motivarse a sí mismos, pero aún no lo han logrado.

Mantén la calma

Es importante que recordemos que nuestros hijos no son los únicos adolescentes que luchan contra la pereza y no quieren hacer sus tareas escolares.

Cuando nuestros hijos están desmotivados o tienen malas actitudes, debemos tratar de tener gracia para ellos. A veces, esperamos que nuestros adolescentes actúen como hombres adultos. Pero recuerde que todavía están aprendiendo y desarrollando el carácter.

Recuerda cómo actuaste y cómo te sentiste cuando eras adolescente. Si usted es como la mayoría de nosotros, probablemente se sintió perezoso y desmotivado de la misma manera que su hijo, al menos de vez en cuando.